1.9.06

LUIS DE NARVAEZ

Luis de Narváez

 Uno de los más grandes compositores y virtuosos de la vihuela del Renacimiento español. Nace en Granada entre 1503 y 1505. Estudió música en su ciudad natal y completó su formación en la corte de la emperatriz Isabel, al lado de Antonio de Cabezón, Francisco de Soto y otros destacados polifonistas españoles. Fue contemporáneo de Luys Milán, pero seguramente desconocía la obra de éste y a su propio autor.
      En 1538 se editó en Valladolid su libro de música en cifra para tañer vihuela, intitulado Los seys libros del Delphin, dedicado al comendador de León D. Francisco de los Cobos, del cual era vihuelista. Además de este libro, se conocen de Narváez dos bellísimos motetes que, según R. Mitjana, se conservan uno en Viena y el otro en Munich.
      A partir de 1548 fue maestro de los niños de coro del príncipe Felipe, a quien acompañó en sus viajes, y más tarde músico de su corte. Flandes, Italia, Alemania, los Países Bajos, etc., conocieron el arte de este vihuelista. En el séquito iba también, como organista, Antonio de Cabezón; es de suponer que existió un contacto musical directo entre ellos.
      Narváez fue el segundo de los vihuelistas españoles cuyas obras de música fueron impresas en España en el s. XVI. Dos años antes había editado las suyas Luys Milán. El Padre. Bermudo, en su Declaración de Instrumentos (Osuna 1555), cita a Narváez como uno de los mejores vihuelistas de su época; por su parte, Luis Zapata dice: «Fue en Valladolid, en mi mocedad, un músico de bihuela llamado Narváez, de tan extraña habilidad en la música, que sobre cuatro voces de canto de órgano de un libro, echaba en la bihuela de repente otras cuatro, cosa a-los que no entendían la música milagrosa, y a los que la entendían, milagrosísima».
      Existieron ediciones parciales de la obra de Narváez, pero la transcripción completa del libro citado se debe a E. Pujol (Barcelona 1945). Los seys libros del Delphin contienen 52 obras: 14 fantasías instrumentales, seis transcripciones de obras de Josquin, dos de Gombert y una de Richafort, diferencias (variaciones) sobre dos himnos gregorianos, dos romances para canto y vihuela y cinco villancicos también para canto y vihuela, dos de éstos con diferencias, 22 diferencias sobre el romance del Conde Claros, y siete diferencias sobre Guárdame las vacas. Y como broche del libro, una Baxa de contrapunto.
      Narváez, cuya obra reúne la gracia, frescura y el buen hacer de un auténtico virtuoso de la vihuela, tiene además el mérito de ser el precursor del arte de la variación.
     
     
JORGE FRESNO.